República de Mauricio 2012 | ||||
30 de octubre, martes A las ocho y media salimos de nuestro apartamento Mo Ti Paradis en Trou aux Biches a conocer La Pointe aux Canonniers. Esta zona plagada de chalets cuenta con un inexpugnable muro continuo de hormigón que protege las propiedades e impide el acercamiento a la costa desde la carretera. Por fin encontramos un acceso directo a la playa por un solar que los chavales emplean como campo de futbol.
Una de mis playas preferidas es Mont Choisy, también favorita entre los mauricianos durante los fines de semana, porque contiene abundantes casuarinas que proyectan sombra y es ideal para venir de picnic con la familia. La casuarina o pino australiano o filaos la trajeron los franceses en 1778 pero fue durante el Gobierno británico de la isla cuando se repobló de casuarinas toda la costa tras comprobar el éxito obtenido en el Canal de Suez, donde se plantaron en gran número para evitar que la arena del desierto penetrara en el canal. Son ideales para este menester porque las casuarinas toleran bien la sal y crecen rápido sin necesidad de mucha lluvia. Mont Choisy ha estado estrechamente relacionado con la historia de Mauricio. Los británicos construyeron en el extremo norte de Mont Choisy una estación de cuarentena para los emigrantes indios, que funcionaba como apoyo a Flat Island o isla Plana, una pequeña isla al norte de Mauricio que también fue utilizada como estación de cuarentena. El premio Nobel Jean-Mari Gustave Le Clézio relata, en su libro La cuarentena, la permanencia forzosa de su abuelo materno en Flat Island a causa de una epidemia de viruela. En 1856, el descuido en las precauciones sanitarias provocó una terrible mortalidad entre los trabajadores indios contratados. La mortandad fue tan alarmante que el Gobierno de la India prohibió temporalmente la exportación de trabajadores a Mauricio.
En 1995 surgió otro conflicto étnico cuando el equipo de fútbol Zamalek de El Cairo jugó contra el Sunrise de Port Louis. Un grupo de mauricianos musulmanes apoyaron al equipo egipcio en vez de al equipo local, que sería lo lógico, y se armó la marimorena. Se suspendieron todos los partidos de fútbol durante el resto del año. otro problema entre comunidades sobrevino con la nueva emisión de billetes de banco de 1998. Hasta entonces, los idiomas inglés, tamil e hindi —en ese orden— aparecían en los billetes de banco. Sin embargo, en la emisión de 1998 se cambió el orden y el hindi aparecía antes que el tamil. Según el Banco Central, el texto en tamil invadía el retrato de Jean Etienne Moi Lin Jean Ah Chuen —una persona relevante dentro de la comunidad china de Mauricio— en el billete de veinticinco rupias. La comunidad tamil protestó con manifestaciones, afortunadamente pacíficas. Los tamiles aseguran que llegaron a la isla antes que la comunidad de habla hindi y aunque solo constituyen un diez por ciento de la población, el Gobierno retiró de la circulación los billetes en junio de 1999 a pesar de que su impresión en Inglaterra había costado quince millones de euros. Así evitaban males mayores como disturbios que podrían espantar el turismo y la inversión extranjera. El cocinero del Kioske Magique —una de las furgonetillas de comida rápida que siempre merodean junto a las playas— no duda en acercarse hasta los turistas que descansamos al sol y repartirnos la carta: banana flameada, pulpo al azafrán, pollo con champiñones, espadón en leche de cacao, y otras delicias mauricianas —la langosta fresca hay que encargarla con dos horas de antelación—. |